jueves, 2 de noviembre de 2023

Las torres del silencio: Edificios funerarios del zoroastrismo

 Las Torres del Silencio. Son edificios funerarios del zoroastrismo, equivalente a los cementerios cristianos


El milenario ritual de las Torres del silencio 

El Zoroastrismo concede una especial importancia a la preservación de las Siete Creaciones (el cielo, las aguas, la tierra, las plantas, los animales, el hombre y el fuego). El hombre, la única creación que es consciente, tiene entre sus obligaciones la de conservar la pureza y lo que tienen de sagrado todas las demás.


Son trabajadores, educados e instruidos y siguen –aunque va languideciendo la tradición- enterrando a sus muertos en las Torres del Silencio, grandes construcciones circulares delimitadas por un muro y un pozo en el centro. Los cuerpos se colocan en la parte superior para que buitres o halcones se alimenten hasta dejar solo los huesos. Después se arrojan a la fosa para su total descomposición.







Los zoroastrianos creen que no se deben perturbar los cuatro elementos de la naturaleza: tierra, aire, agua y fuego. Por eso no se entierra a los muertos, para no perturbar la tierra; tampoco se pueden incinerar porque el humo resultante contaminaría el aire. Ni arrojarlos a un río o un océano porque se perturbaría el agua. Por ello, los parsi colocan los cuerpos en lo alto de una torre, a la que llaman Dakhma, o “Torre del Silencio”

 Esta veneración a la naturaleza ha llevado a algunos estudiosos a proclamar el zoroastrismo como «la primera religión ecológica del mundo»

El Proceso de la Torre del Silencio


En la torre del silencio hay tres anillos concéntricos: el exterior se utiliza para hombres, el centro para mujeres y el de en medio para niños. Después de que los pájaros carroñeros picotean la carne y los huesos quedan al descubierto, los restos se acumulan en el agujero debajo de la cripta y se les agrega cal, a partir de la cual se destruyen gradualmente en un proceso que dura aproximadamente un año.









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